El noni, conocido en algunas regiones de nuestro país como guanábana cimarrona y por otras culturas como planta calmante, gran morinda, fruto de queso, árbol para dolor de cabeza, nono y muchas más denominaciones, constituye un alimento de gran prestigio, avalado por numerosas investigaciones realizadas por científicos cubanos y de otros países.
Su origen se remite, según la historia, al sudeste de Asia, aunque abunda desde la India hasta las regiones del Este de la Polinesia. Los nativos de Hawai, Tahití y las islas del Pacífico Sur han utilizado el fruto, las flores, las hojas y la raíz durante dos mil años para preparar remedios efectivos contra muchos padecimientos.
Morinda citrifolia es el nombre científico de esta planta perteneciente a la familia de las Rubiáceas, que incluye ochenta especies, de las cuales la mayor parte se encuentra localizada en el Viejo continente. Morinda officinalis y Morinda royoc (otras especies de noni) también son utilizadas básicamente con fines medicinales. La planta alcanza una altura de cinco metros, posee hojas grandes de color verde oscuro brillante y flores blancas pequeñas. El fruto es algo similar a la guanábana, pero más pequeño y de color verde,
y posee sabor y olor característicos, por lo que su jugo se recomienda combinar con otros zumos más agradables.
Las magníficas cualidades del noni vienen a sumarse a los descubrimientos actuales referidos al enorme potencial curativo proveniente de los vegetales, dado por la presencia de sustancias biológicamente activas. Y el noni no constituye una excepción, todo lo contrario. Según el doctor Neil Salomón, autor del libro El jugo de Noni. La fruta de los
101 usos medicinales, esta panacea vegetal estimula el sistema inmunológico y regula la función celular y la regeneración de las células dañadas. El destacado científico realizó una encuesta a ocho mil personas que tomaron noni y el resultado final evidenció su contribución para aliviar a 78 % de las personas que lo consumieron, y 60 % de ellas destacó que no dejarían de tomarlo por nada.
Otros investigadores, como el bioquímico estadounidense Ralph Heinicke, descubrieron en la composición del jugo del noni una cantidad apreciable del precursor de la xeronina: la proxeronina. Esta última es capaz de liberar xeronina pura en los intestinos cuando entra en contacto con cierta enzima que también se encuentra en este jugo. La xeronina es un alcaloide muy importante para el adecuado funcionamiento de todas las células del organismo. Este ingrediente clave del noni tiene la capacidad de ayudar a disminuir el dolor y resulta esencial para el bienestar del cuerpo humano. Como otros elementos bioquímicos, la xeronina aumenta su producción si tenemos pensamientos y experiencias espirituales positivas, mientras que el estrés, las emociones y los pensamientos negativos disminuyen su obtención. Los niveles de esta sustancia en el organismo humano decrecen con la edad y una dieta inapropiada.
Según los especialistas, algunos de los efectos más notables del noni sobre la salud humana resultan el fortalecimiento del sistema inmunológico, el aumento de la energía del organismo, el alivio del dolor, actúa como agente antiinflamatorio y antihistamínico, posee propiedades antibacterianas que pueden proteger contra trastornos digestivos y lesiones cardíacas, interactúa con la melatonina y la serotonina para ayudar a regular el sueño,
la temperatura y los estados de ánimo; inhibe la función precancerosa y el crecimiento de tumores cancerosos, y controla la tensión arterial. En Cuba los campesinos le suelen atribuir propiedades afrodisíacas.
En China, la raíz de la Morinda officinalis (otra especie de noni) se ha usado contra los desórdenes de los sistemas estructural y endocrino, y el desequilibrio emocional.
Su poderoso efecto anticancerígeno resulta probable por la sinergia de los múltiples fitonutrientes del noni, que hacen que actúe como un adaptógeno (sustancias nutritivas
que ayudan a las células anormales o enfermas a funcionar más normalmente). De forma general se han reconocido veintitrés fitoquímicos en la planta noni, así como cinco vitaminas y varios minerales, como calcio, magnesio, fósforo, sodio, cinc, cobre, potasio
y hierro.
Un equipo de investigadores japoneses estudió el efecto de más de quinientos extractos de frutas tropicales para ver si encontraban algo que inhibiera el crecimiento de las células cancerosas RAS (células primarias del cáncer, las que tienen un rápido crecimiento muy difícil de detener). Se descubrió que el compuesto damnacantal, hallado en la Morinda citrifolia, era un inhibidor de la función RAS y resultó el más eficaz entre los extractos utilizados. Vale argumentar que el oncogén RAS es una parte normal de la estructura celular de toda célula. Se trata de una pequeña proteína del RNA (ácido ribonucleico)
de la célula que codifica para la reproducción celular. Sólo cuando es activada por una proteína carcinogénica, en el interior de la célula, pone en marcha un mecanismo que
hace que la reproducción celular sea descontrolada. Si uno logra desconectar este mecanismo (la actividad descontrolada del RAS), también puede detener el crecimiento
del cáncer.
Las investigaciones continúan y cada vez se le descubren nuevos fitoquímicos. Un epidemiólogo de la Universidad de Minnesota, el doctor John Potter, declaró a la revistaNewsweek: «A cada paso que damos en el sendero del cáncer vemos que los fitoquímicos enlentecen e invierten el proceso canceroso».
En nuestro país el noni se ha localizado tradicionalmente en la región oriental, aunque en los últimos años se ha generalizado grandemente. En el politécnico Villena-Revolución, del municipio Boyeros, desde hace varios años se desarrolla un intenso trabajo liderado por el médico veterinario Isidoro Trinidad Scull Campos y el colectivo de trabajadores y estudiantes. Allí surgió el PV-2, suplemento nutricional logrado a partir de la raíz de laMorinda royoc; otras posibilidades derivadas de la fruta del noni están siendo investigadas actualmente a través del sistema de salud cubano, y de importantes centros científicos del país. A partir de su creciente popularidad, el noni está siendo propagado intensamente en patios y jardines, y muchas personas lo consumen y consideran un elixir mágico, lo que resulta altamente gratificante, pues se trata de una manifestación que mucho contribuye
a fortalecer la salud de las personas, y no se le conocen contraindicaciones.
Desde el punto de vista culinario se puede procesar preferiblemente en forma de jugo,
para lo cual se pasa por la batidora, se mezcla con agua u otro zumo (por ejemplo, jugo
de frutabomba o piña) y se cuela. Se debe endulzar a gusto. Su fuerte olor y sabor lo sitúan como una planta no muy apreciada por los amantes de los bouquets más sutiles, por lo que se recomienda combinarla con otros sabores. Se debe procurar acercarse a ella, por sus notables propiedades medicinales. Debe ingerirse en pequeñas dosis antes del desayuno y de la cena, alejado del café, el tabaco y el alcohol.
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