Noni. La fruta regeneradora.

La planta tropical del Noni es originaria de Oceanía, crece salvaje en tierras volcánicas sin impurezas y da su fruto (del tamaño de una patata) todo el año.

Tradicionalmente los habitantes de éstas islas utilizan la fruta del Noni desde hace más de dos mil años para contrarrestar una sorprendente cantidad de enfermedades ya que el Noni aumenta las defensas del cuerpo.

El Noni contiene una gran variedad de sustancias medicinales. Cabe destacar su contenido en proxeronina que en el cuerpo se transforma en xeronina, cuya función importante es la de la renovación de las células y la reparación de células dañadas o anómalas.

Hay que decir también que el Noni tiene unas propiedades extraordinarias como analgésico, antiinflamatorio y antihistamínico, mejora el estado de animo, aumenta el sistema inmunológico, regula la presión sanguínea y actúa contra las enfermedades causadas por parásitos en el organismo.

La fruta del Noni tiene un olor y sabor desagradable. Es por esto que se ofrece siempre en forma líquida añadiéndose a zumos de frutas.

El Noni se comercializa en forma de cápsulas con un contenido estándar de frutas como complemento nutritivo que debe tomarse durante un largo periodo de tiempo.